TORNEO NACIONAL DE ASCENSO. En su segunda presentación en casa, Sarmiento mostró un nivel que, de aplicarse al TFB -torneo para el cual se conformó inicialmente este plantel- sin dudas sería un serio candidato. Tanto, que en el TNA -donde está jugando- este miércoles venció con absoluta claridad al hasta alli invicto Villa Angela Basket por 78-60.Con un ritmo intenso, vertiginoso aun para su rival que está acostumbrado a jugar a en ésa “velocidad”, el Decano, una vez que se acomodó en el camino, creyó en si mismo y sin importarle quien estaba enfrente, propuso y llevo adelante su estilo de juego hasta alcanzar la victoria.

En los primeros diez, Villa Angela comenzó un poco mejor. Tanto que aprovechando su estilo de juego -aquél de las contras y transisiones- y la aparición protagoniza de Raines, llego a estar 7 arriba. Pero Sarmiento no perdió la calma, y con Serantes (21, 6 aca) y Diez (12, viniendo desde el banco), logro armar un parcial de 15-2 que le permitio ganar el primer cuarto 21-15.

A partir de alli, el juego fue otro, porque Sarmiento ya se había convencido de que podía y otro tanto, pero desde la vereda contraria, sucedía en La Villa. Y entonces el Decano comenzó a mostrar su mejor cara: la de la muy buena circulación de balón y buena selección que, junto a la polenta de Peruchena (9, 5 acá), le permitió empezar a abrir la primera brecha llegando a ganar por 11. el recambio obligado por el intenso calor y el objetivo de no bajar la intensidad, le dio a la visita la posibilidad de armar un parcial de 12-10 que no achicaba mucho la distancia pero sembraba alguna incertidumbre al término del primer tiempo que también ganaba Sarmiento: 38-29.

En el tercer cuarto, un encendido Serantes, volvió a lastimar con goles de todos los colores para poner al Decano 16 arriba: 51-35. Por entonces, VAB ya no estaba tan seguro de que hacer, tanto que ya había intentado varias opciones defensivas, y solo algún yerro del local le permitió acercarse 43-51, gracias básicamente al inclaudicable Martín Gandoy (27, 12 en éste período). Pero bastó que el local pudiera correr dos veces seguidas y que Sayal (9) clavara “su” triple para que el 59-47 del cierre de los 30, pusiera nuevamente distancias entre uno y otro.

Una distancia que en el ultimo cuarto se mantuvo y que en el cierre se amplio porque mientras Sarmiento siguió jugando a sus anchas, con convicción pero sobre todo intensidad y convicción, La Villa termino mostrándose sin ritmo y eso, para el-ella, es un suicidio. Tanto, que el 78-60 con el cual dejo su invicto en Resistencia, es ampliamente justificado por lo hecho por su rival: el modesto, pero intenso y digno de ver Sarmiento.

Foto: Martín Lemos