“Lo tuyo es fácil: vas te sentás y hablás” me dijeron más de una vez algunos demostrando la mas grande ignorancia, no solo del trabajo periodístico en si, sino de todo lo que se debe hacer para que un producto esté en el aire. Desde cubrir las actividades, hasta realizar la producción de todo -léase, desde lo que va, a de qué forma y en qué lugar- hasta solventar el espacio donde se pone al aire o “se sube” la información. Pocos saben que para mantener en vigencia a Super Basquet, más de una vez debí recurrir al crédito que me permitiese cumplir con las obligaciones: desde el espacio, hasta el camarógrafo y el editor, sin contar con muchos otros aspectos que hacen que un producto este en el aire. ¿Quiere mas? También se sufre -cuando se ejerce el periodismo objetivamente- censura. Si, censura. Tal como me ocurriera cuando alguien -por entonces con poder y molesto porque decía (SB) lo mal que se estaban haciendo las cosas- dijo: “O Buittoni o nuestra pauta” y obviamente, ya saben para qué lado cayo la elección del medio que inmediatamente me sacó del aire. O, un poco más acá, donde mi defensa de un jugador y un técnico excluidos del ambiente -su trabajo en definitiva- por decisiones de algún “cerebro”, hizo que por mucho tiempo para saber que pasaba debiera recurrir a los amigos (que por suerte siempre tuve). Si aun alguien sigue pensando que “lo mio es fácil”, lo invito a sostener un producto NO 25 años, Uno solo. Después hablamos.